El tiempo no lo cura todo

 

Carta 1 

Tiempo después de que me decidiera a olvidarla, su recuerdo se arraigó más en mi interior, donde la soledad viene a saludar es donde siento que mas estas, nada me ha hecho olvidar aquellos labios, aquellos ojos, aquella risa acompañada de la más dulce sonrisa. Quien diría que cada día, se ha vuelto una lucha perpetua por intentar que no entres a mi mente, se de alguna forma que siempre estarás conmigo, pero eso no es lo que duele, lo que duele es que quisiera decirte tantas cosas, quisiera cambiar tanto que ya no hay tiempo.

Shayla el tiempo no lo cura todo, tal vez mientras nos mantengamos ocupados nos olvidemos por un rato de aquella cicatriz que hay en nuestro corazón, de aquella cicatriz que hay en mi corazón, en mi interior, duele de placer la cicatriz que has dejado en mí, puesto que siempre eres material de escritura, motivación y anhelo de inmortalizarte en el supremo deseo de mantener la especie, anqué yo voy corriendo, y tu ibas andando.

Espero conforme pasan los días, alguna señal de vida de ti, la verdad, parece como si te hubiera tragado la tierra, y a mí me hubiera absorbido el tiempo, mi vida no fue tan especial después de que te fuiste, simplemente me dedique al estudio, mi Universidad, el trabajo, y continue escribiendo en algunas ocasiones, sin embargo ahora que el dolor apremia más, en cuando termino por escribir esto, a veces paso por donde vives con la esperanza de verte de nuevo quizá lleno al mandado tal vez alguien más, pero por lo menos ya me resignaría.

El tiempo me dice, hay Edgar continua adelante, déjala atrás, como puedo dejar atrás, señor tiempo, la primera vez que conocí el amor, y es gracioso, ya que esta a la vuelta de la esquina, y es aún más estúpido, ya que sacrifiqué lo que tenía por un trabajo, tal vez si solo hubiese seguido con… olvídalo no vale la pena lamentarse, o pensar en como hubieran sido las cosas, por que lo que fue ya fue y solo se que ya no esta bajo mi control, los recuerdos o el pasado.

A fin de cuentas, Shayla, que te puedo decir no importa lo que haga ahora, tu tomaste tu desciño, no me amas, no me quieres, por lo tanto, de que me sirve querer hacerle la lucha, se que nunca podremos estar juntos, y vaya que duele, pero si me detengo aquí y en algún momento nos volvemos a encontrar que te podría decir, hoy han pasado 7 años y aun te sigo amando, seria super raro y soñaría más a obsesión que a amor, aunque últimamente ya no se identificar entre una y otra.

No, no, importa cuánto quiera, cuanto desee el hablarte el mandarte un mensaje, no lo hare, porque, por que debo aceptar que las cosas ya terminaron y que has conseguido un remplazo para mí, que como dirían Fromm has encontrado el mejor candidato en el mercado de las relaciones interpersonales.